El acceso de los millennials -los nacidos entre 1980 y 1993- a puestos de responsabilidad en la política y la economía está teniendo importantes repercusiones en las sociedades modernas. Sin embargo, la entrada en escena de estos jóvenes no ha supuesto una ruptura con los modelos anteriores, sino, más bien, una aceleración de los cambios que ya estaban en marcha.
Aunque se trata de un proceso todavía inacabado, ya que los millennials aún no están plenamente incorporados a la actividad productiva, son muchos los expertos que han empezado a observar en las nuevas promociones de alumnos de secundaria y universidad una serie de particularidades que hacen pensar que se está gestando un salto generacional mucho mayor.
Es la denominada Generación Z, que agrupa a las personas nacidas con la World Wide Web ya totalmente desarrollada y presente en la gran mayoría delos hogares (Happen, 2015).
Entre los rasgos más sobresalientes de los Z se encuentra el omnipresente uso de las TIC en toda relación social, laboral o cultural; su creatividad y adaptabilidad a los entornos laborales emergentes; la desconfianza hacia el sistema educativo tradicional, que da paso a nuevos modos de aprendizaje más centrados en lo vocacional y en las experiencias, y el respeto hacia otras opiniones y estilos de vida.
Repasamos algunas de las características que diferencian a esta generación que está llamada a liderar el mundo: