22 de diciembre de 2017
Resumen de la comparecencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al término del Consejo de Ministros.
Mariano Rajoy inició su comparecencia exponiendo su valoración sobre los resultados de las elecciones autonómicas en Cataluña que tuvieron lugar en el día de ayer. Recalcó que éstas se habían celebrado dentro de la ley, restaurando el principio de legalidad y con todas las garantías electorales precisas.
No quiso ahondar en los resultados, ya conocidos, y aclaró que había felicitado personalmente a Inés Arrimadas y su partido, como ganadores en escaños y votos de las elecciones. Lo negativo, ha recalcado, “es que quienes queríamos el cambio no hemos conseguido los escaños suficientes”. Ha recordado, además, la pérdida de apoyos de los partidos favorables a la independencia, elección tras elección, desde el año 2010. El mensaje, según el presidente del Gobierno, es claro: “Nadie puede hablar en nombre de Cataluña si no contempla a toda Cataluña. Ésta no es monolítica, es plural y hay que cultivar esta característica como una riqueza”.
Ha continuado lamentando la fractura que la radicalidad ha generado en la sociedad catalana, apuntando que llevará tiempo recomponerla y esta meta debería ser la principal función de todos los actores en Cataluña. Una reconciliación que ha de venir, como siempre ha apuntado, en el marco de la Ley. Ha resaltado que corresponde ahora a los partidos electos ofrecer las soluciones de gobernabilidad en Cataluña y que, sea cual sea el resultado, éste nuevo gobierno estará sometido al imperio de la ley. Finalmente, ha destacado que considera que unas elecciones son siempre un nuevo comienzo, y pone su confianza en que ahora se abra en Cataluña una etapa basada en el diálogo y la pluralidad, dejando a un lado el enfrentamiento y la unilateralidad.
En la ronda de preguntas posterior a su comparecencia ha asegurado que la aplicación del artículo 155 se hizo como debió hacerse y éste dejará de desplegar efectos cuando se forme un nuevo Gobierno en Cataluña, tal y como estableció el Senado, y que no tiene ninguna intención de convocar elecciones generales ni finalizar de forma anticipada la legislatura.