1. Conocer el entorno y relaciones de la Compañía
Analizar el posicionamiento actual de una compañía es un elemento fundamental para definir una estrategia de asuntos públicos en la que tender puentes sea uno de los objetivos operativos marcados. Conocer dónde se encuentra la empresa en el espacio público, cuáles son sus relaciones, quiénes son sus aliados y adversarios o cuáles son las fuentes de poder que puede manejar para aumentar su influencia en el debate público. Desde Inforpress consideramos que en este punto, la elaboración de mapas de stakeholders, así como el análisis de las relaciones de unos actores con otros en el ecosistema, son piezas prioritarias para el desarrollo de acciones tendentes a conseguir aliados o acercar posiciones con otros actores.
2. Ser incluyente
Buscar alianzas, incluso en territorio hostil. Escuchar, ser tolerante, ceder e incorporar elementos del otro en nuestro discurso. Hoy en día, para influir en el espacio público se necesitan aliados, y para conquistar aliados, la propia compañía necesita conocer al otro e incluir apropiadamente sus posiciones en el discurso o, al menos, acercarse a ellas.
3. Empatía
Empatía es ponerse en el lugar del otro. Pero hacerlo de verdad. Conocer sus intereses y sus necesidades. A veces, cuando se conoce bien al otro, podemos descubrir que no estamos tan lejos de él. En circunstancias especialmente graves y en sectores regulados y estratégicos los acuerdos son muy importantes. Merece la pena invertir en ellos nuestros mejores esfuerzos.
4. Ser pragmático
Aportar soluciones concretas a los problemas. Evitar atascos innecesarios y no caer en obstáculos que fácilmente son evitables (o que incluso si se analizan bien ni siquiera constituyen un obstáculo). Aparcar la ideología y poner sobre la mesa propuestas realistas que mejoren la vida de las personas y que tengan en cuenta el interés general de una ciudad, de una región o de un país. Hay que ser fiel a los propios principios y expresar valores que han de ser tenidos en cuenta, pero defenderlos con flexibilidad si no queremos estar condenados al aislamiento.
5. No pelearse innecesariamente
Pelear desgasta. Pelear innecesariamente ocasiona a la compañía grandes costes de dinero y de esfuerzos. Los costes del no acuerdo son muy elevados. Pelear, además, provoca la creación arbitraria de enemigos. El enfrentamiento, la confrontación, es una última ratio: hay que acudir a ello cuando no hay más remedio. Pero debe evitarse siempre que sea posible. Una buena gestión de public affairs se basa en buena medida en ser respetuoso con el contrario y buscar siempre la reconciliación.
6. Engagement
Buscar el elemento clave que nos va a vincular con el otro. Para Inforpress, la vinculación, el enganche, es una pieza clave de toda estrategia de asuntos públicos. Sin ella no se tenderá el puente. Nuestros compromisos revelan quiénes somos. La vinculación es lo que nos une a un actor que consideramos clave para nuestros objetivos e intereses. Cuando uno halla ese elemento de unión sostenible con el otro, tendremos la base para construir la alianza. Entonces podremos tender el puente de manera duradera y nuestra estrategia de diplomacia corporativa tendrá más posibilidades de ser exitosa.